Desfile del Día de la Victoria

Decenas de miles de soldados con rostros impávidos desfilaron por la Plaza Roja el lunes, en el despliegue anual de poderío militar ruso para celebrar el Día de la Victoria, que conmemora la victoria soviética sobre Alemania nazi, al tiempo que el presidente Dimitry Medvedev dijo que el país está comprometido con la paz y la estabilidad global.

El desfile es la pieza central del feriado más solemne en Rusia, que conmemora los enormes sacrificios de la Unión Soviética en la guerra y reafirma el poder de sus fuerzas armadas.

Los 20.000 soldados que marcharon con impecable precisión por la vasta plaza junto al Kremlin fueron seguidos por más de 100 piezas de armamento móvil, desde transportes blindados hasta lanzadores de cohetes balísticos intercontinentales Topol-M. Concluyó con un escuadrón de helicópteros portando banderas sobre la plaza pero esta vez, en algo inusual, no incluyó aviones.
Aunque las fuerzas armadas rusas sufrieron a causa de severa reducción de fondos y problemas de ánimo en los primeros años posteriores a la disolución de la Unión Soviética, el desfile presentó una imagen de poderío y elegancia, con énfasis en disciplina y precisión.
Medvedev le dijo a la multitud, que incluyó a muchos veteranos de guerra con el pecho engalanado de medallas y condecoraciones, que la restauración de las fuerzas armadas continuaría.

"El estado seguirá haciendo todo lo posible para garantizar la dignidad del servicio militar, mejorando activamente a las fuerzas armadas para que los soldados tengan el equipo más moderno", dijo.

"Hoy, Rusia defiende firmemente los principios de cooperación pacífica, aboga consistentemente por un sistema de seguridad y contribuye al esfuerzo general para mantener la estabilidad global", dijo el presidente ruso en su discurso, pronunciado desde una tribuna colocada frente al Mausoleo de Lenin.

El mausoleo, punto central de la plaza, quedó tapado por una crehuela pintada para celebrar le fecha, reflejando lo delicado de conmemorar una victoria lograda por el régimen soviético que está ahora básicamente desacreditado. Algunas de las unidades militares en el desfile llevaron banderas viejas con la hoz y el martillo.